30 de enero de 2007

30 de enero de 2007

Como todos los años en la misma fecha, hoy se celebra el Día Mundial de La Paz. Se hace el 30 de enero porque tal día como hoy, en el año 1948 falleció un hombre que dedicó su vida a extender una filosofía que abogaba por el pacifismo como una forma de revolución.

Era un filósofo y pensador que llegó a ser uno de los padres fundadores del Estado de la India. Algunos creen que estaba predestinado a ser lo que fue, su nombre significa “Gran Alma Perfumada”. Se llamaba Mahatma Gandhi. Su pensamiento y el modo como condujo su vida ha inspirado a generaciones enteras y a otros hombres que fueron “grandes activistas por la democracia y la libertad”, como Martin Luther King. Jr; Lech Walesa y Nelson Mandela.

Gandhi era un tipo sencillo y tímido al que costaba mucho hablar en público. Su carácter cambió radicalmente cuando vivió la humillación y la opresión a las que estaban sometidos los indios en Sudáfrica.

Sus principios filosóficos eran simples: APEGO POR LA VERDAD Y NO VIOLENCIA y aplicándolos lideró grandes manifestaciones a favor de la independencia de la India que al final, logró.

Es muy fácil reprimir, agredir y asesinar a una persona, fuera de la vista de otras, incluso aunque se defienda. Es fácil reprimir a unos pocos que se defienden, aunque si es de forma pública siempre se verá a los represores con aprensión. Es más difícil y tiene muy mala imagen reprimir a millares con violencia (como se hizo en la plaza de Tiang ahn Meng). Reprimir de forma pública a millares que reciben las más crudas represiones, incluso el asesinato SIN DEFENDERSE, causa en los agresores un sentimiento de vergüenza ante los observadores, imposible de mantener.

En las cárceles antiguamente se utilizaron mucho los sistemas de resistencia pasiva contra los abusos de la Institución Penitenciaria. Ahora se usan menos, de forma colectiva.

Mahatma Gandhi luchó durante toda su vida por eliminar el sistema de castas en su país pero, aún hoy sigue existiendo aunque de forma menos evidente pero firmemente enquistada en el corazón de las capas sociales.

Comisión de Cultura

M-6