sábado, febrero 20, 2010

TEATRO EN PRISION

Hemos tenido la agradable visita del Grupo de Teatro PORTA ABERTA, que nos ha acercado aquí a Prisión la obra A BUFARDA (en gallego) del dramaturgo, D.Antonio Buero Vallejo, bajo la dirección de Froina Garcia y con la actuación de Pablo Fernandez, Fany Gonzalez, Julio Blazquez, Teo Borrajo y Sonia Gonzalez.

Buero nos situa escenas cotidianas de una familia destrozada por los efectos de una guerra desvastadora, que intentan sobrevivir escapando de sus miserias, en un realismo descarnado donde se juntan los deseos de lo que puede ser, con la desesperanza de lo que no es.

La presencia de todos los actores en el escenario, algunos en posición silente y estatica, -tal cual autenticos mimos- sirve como muda referencia a la siguiente escena que cobra su magia en la referencia en "off" de los actores estaticos.

Sonia Gonzalez representa a la madre de una familia desgarrada y separada por una enorme sima ideologica y coyuntural, empeñada en mantener unida a una familia que se mueve entre el dolor y la locura: amor de madre protectora de dos hijos en la diaspóra de los sentimientos y atormentados por la muerte de una hermana pequeña, con la referencia de un tren inexistente, que los situa en la nostalgia del espacio y del tiempo.

Teo Gonzalez representa al padre sumido en una locura infantil y trasnochada, como si el tiempo se hubiera detenido y desde ahí, marcase sus referencias con el mundo que le rodea, sin entender las complejidades de las relaciones entre sus hijos, a los que a veces no llega ni a reconocer y siempre la referencia intemporal a la muerte de su hija pequeña, que siempre marca un antes y un despues.

Fany Gonzalez representa a una Encarna muy creible en su papel de punto de conflicto en los sentimientos y relaciones entre los dos hermanos: el amor que siente por Mario (Julio Blazquez) idealista y soñador, y la depencia respecto a Vicente (Pablo Fernandez, magistral) en sus relaciones laborales, de amantes ocasionales y de esperanzas de futuro.

La escena final, con el asesinato de Vicente a manos de su padre -recuperado de su locura, como venganza por la muerte de la pequeña, representa el punto algido de la obra y la que devuelve la esperanza a los protagonistas.

La narración de Maria Gonzalez y María de Oya nos conduce a traves de la obra con un guion fiel del experimento teatral que se desarrolla en el escenario. Los arreglos de Javi Montenegro y Monica Fernandez dan el contrapunto adecuado a la sobria puesta en escena del mejor teatro de Buero Vallejo. Un buen espectaculo que nos ha enriquecido humanamente y nos ha servido para pasar un buen domingo.

TELMO

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