EL PODER DE LA MENTIRA

La mentira se ha vuelto hoy día parte de nuestro hablar diario, hasta el punto que se llegan a considerar piadosas o se usa para enmascarar otros defectos. ¿Qué pasa cuando se compagina con otros defectos como la codicia? Hace poco leí un libro que hablaba precisamente de esto: Mentira y Codicia. Los personajes de la trama un Rey, un Papa y la victima un hombre bueno; este hombre fue Jacques de Molay y con los 138 Caballeros Templarios que fueron torturados y llevados a la muerte en la hoguera y; de otros 1000 capturados que consiguieron salvar sus vidas a cambio de mentir acusando a sus hermanos de la orden. Los antecedentes: desde su fundación en el año 1118 hasta su extinción en el año 1314 la Orden del Temple tenía unos votos (obediencia, pobreza y castidad). Durante todo este tiempo protegieron lo caminos a los lugares santos y a sus peregrinos. Poseían tierras y castillos en Francia, Italia, Inglaterra, Escocia, Alemania, Chipre y España y Posiblemente el mayor tesoro jamás hallado. En esta situación Jacques de Molay llegaba con 54 años (en 1298) a ser el ultimo gran maestre de la Orden del Temple, teniendo bajo su mando absoluto a mas de 15000 hombres y solo sometido a la autoridad del Papa. Los villanos de esta historia fueron el Rey de Francia Felipe IV y el Papa Clemente V que; codiciando el poder absoluto y, viendo en los Templarios una más que probable resistencia a sus planes, dada su fama de incorruptibles.
Mintieron acusándoles de herejías, idolatría, prácticas homosexuales y otras falsas acusaciones, que viniendo de tales cargos el pueblo no pondría en duda. La inquisición al servicio del Papa, sirviéndose de mazmorras y torturas consiguió que reconocieran prácticas que nunca existieron. En realidad hoy nadie duda de que tales acusaciones sólo persiguieran fines económicos y políticos. El 18 de Marzo de1314, Jacques de Molay y dos de sus lugartenientes eran ejecutados en la hoguera y con ellos la orden fue proscrita, muchos de sus integrantes se incorporaron a otras ordenes religiosas o huyeron a Escocia.“La mentira amparada en la codicia había conseguido destruir a muchos hombres buenos”.
En 1545 aparece en Zamora un documento en el cual la Inquisición reconoce no haber hallado prueba alguna contra los templarios. En el año 2001, el 13 de diciembre se descubren en los archivos vaticanos un documento de Clemente V donde se establece la inocencia de los templarios y su Orden. “Para ellos su único aliado fue el pasar del tiempo”.
“No permitamos que en pleno siglo XXI la mentira siga siendo un patrón en nuestra sociedad, porque de lo contrario estaremos repitiendo los errores del pasado.



R. B. E.