Era tan pequeña y flaca
Que apenas tenía sombra.
Ocupaba tan poco espacio,
Como la luz en la penumbra.
Era un átomo de amor enriquecido
Pequeñito, plegado sobre si mismo,
Alma y corazón comprimido
Sin lugar para el egoísmo.
El sol no la quemaba,
La lluvia no la mojaba,
El rayo no la encontraba,
Y el viento la acariciaba.
Era un torrente de ternura que lloró
Era, dinamita pura y estalló
Era un corazón abierto que gritó
Era, un alma dormida y despertó.
La niebla no la ocultaba,
Ni la desorientaba,
Sabía lo que buscaba
Y nunca desesperaba.
Fue un día de otoño atormentado
Mini Marta explotó y pude sentirla
Bajo un cielo sin sol, apagado,
Y que puedo hacer yo, sino amarla.
La luz de su explosión me inundó
Y supe que hacer con tanto amor
El miedo a romperla se esfumó
Y pude abrazarla sin temor.
Para Marta, que tardó dos años en decirme que me quería, pero… me lo dijo
KOKE
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